jueves, 26 de agosto de 2010

6 DE AGOSTO: EL DÍA D

Y llegó el día más esperado por Iker. El día en que íbamos a recorrer un puñado de enormes puertos en Suiza. Gran inconveniente: el clima. Llevaba lloviendo sin parar desde el día 4 por la tarde y el día 6 por la mañana tuvimos que recoger el campamento con las tiendas mojadas, con barro, con una sudada considerable por la ropa de la moto puesta...
Teníamos por delante un recorrido de lo más sugerente: Sustenpass, Gotthardpass (incluída la via Tremola), Nufenenpass, Glimsenpass, Furkapass, Oberalppass y carretera hasta St Moritz. Total, unos 420 km. Finalmente, como se nos hacía tarde y sabíamos que tendríamos que secar las tiendas al montarlas, decidimos parar en Churwalden, haciendo unos 350 km, que visto el transcurso de la jornada, tampoco estuvo nada mal.


Ver mapa más grande

En el recorrido del mapa se ve algo así como un ocho, en el que nos encontramos de todo.

Sustenpass

Salimos de Interlaken lloviendo, con una temperatura por debajo de los 10 ºC y sudando, así que en pocos km el frío era considerable. Como en los túneles la temperatura era mayor, al entrar en ellos se empañaba todo: la pantalla del casco por fuera, los espejos, los relojes de la moto, la cúpula...
Llegamos con esa compañía al pie del Sustenpass y comenzamos la ascensión lentamente. Dejó de llover, pero la calzada brillaba peligrosamente así que subíamos muy despacito. Lástima no poder disfrutar de aquella subida ni de los paisajes que seguro que estaban allí. La niebla que nos había ocultado las montañas alpinas los últimos dos días nos esperaba poco más arriba.
Así que de la fase lluvia, pasamos a la fase niebla. No se veía nada así que avanzábamos guiándonos por las líneas de la calzada... ¡¡hasta que llegábamos a algún tramo en el que NO había líneas!!!!
Cerca del final de la subida (serían 3 ó 4 km?) la niebla pareció que empezaba a aclararse y había más luz... pero no porque la niebla fuera menos espesa sino ¡¡¡POR LA NIEVE que había a nuestro alrededor!!! Y cuando llegábamos al punto más alto, además nos empezó a caer una fina cortina de blancos copos.

No estábamos en Sustenpass, sino en Infernalpass.
Este de la foto puedo asegurar que soy yo.




Al cruzar a la otra vertiente, la niebla desaparece al bajar un corto trecho y se empieza a ver la luz.



Gotthardpass

A medida que nos fuimos alejando del Infernalpass, la carretera se fue secando y para cuando llegamos al Passo di San Gottardo (Gotthardpass) el frío y la nieve eran casi un lejano recuerdo. Subimos con cierta alegría este puerto y lo bajamos sin parar en la cima esta vez. Impresionantes curvas de herradura sobre puentes


...y otras curvas bastante más amplias que invitaban a darle alegría al gas en un asfalto en perfecto estado.
Yo me preguntaba "¿y el famoso tramo de adoquines?" Pero en esto que llegamos a un cruce abajo y una de las vías se dirigía hacia el pueblo (Airolo) y la otra hacia arriba que señalaba "Via Tremola": ¡¡esta es la nuestra!! Así que iniciamos una nueva subida, esta por el trazado antiguo y con un firme de adoquines. Esta subida resulta realmente preciosa y memorable. Un trazado con curvas cerradísimas, con una pendiente que oscila entre el 7 y el 9 % en sus casi 13 km, con un "descansito" del 3,2% y otro para compensar del 11,4%. Empeamos a unos 1200 m y el puerto sube hasta 2091 m. ¡¡Hace falta paciencia y mucha gente para llenar todo ese trazado de adoquines!!
Estaba totalmente seco... no quiero pensar qué habría sido con las condiciones que nos encontramos en el puerto anterior.
Al llegar arriba, la niebla estaba cerca y hacía un viento helador. Eso sí, si hay gente, hay chiringuitos. Así que nos comimos unas salchichas para calentar un poco el cuerpo.



Nufenenpass - Glimsenpass (1) - Glimsenpass (2) - Furkapass

Al llegar a Airolo, cogimos la carretera hacia el Passo della Novena, que en los mapas salía como Nufenenpass... cosas del multilingüismo suizo... en otros lares más cercanos esto no ocurre con esa naturalidad...
Esta carretera es la que nos lleva a Glimsenpass, pero dicho Nufenenpass fue una grata sorpresa en el camino. Un puerto rápido, con buen asfalto, con curvas enlazadas muy entretenidas y al llegar arriba... lo de siempre: vistas fabulosas.
Tras las fotos de rigor, bajamos el puerto (otro descenso entretenidísimo) y nos dirigimos hacia Furka y Glimsen. Tomamos la desviacion a la izquierda hacia Glimsenpass y a medida que vamos ascendiendo, vemos el otro puerto en la ladera opuesta. Subida alegre y al llegar arriba nos espera otro lago. Para mi lo mejor de este puerto fue la otra ladera: primero en bajada hasta el pueblo de Guttannen y después en la vuelta hacia la cima. Ya se me han terminado los calificativos para expresar lo que suponía subir o bajar estos colosos con la varadero, tumbando a uno y otro lado, con las frenadas y las salidas de las curvas... Realmente divertido. Intentaré no repetirme en los puertos que quedan.
En la segunda subida hacia Glimsen, vi que el marcador de la varadero se acercaba a la redonda cifra de 93000 km, que se cumplieron justo en la cima. Paré junto al lago y le hice una foto.

Tocaba bajar nuevamente hacia el cruce y coger la subida de Furka.
En esta subida paramos en un albergue-hotel junto al glaciar y aprovechamos para hacer alguna foto más.
Finalmente nos quedaba Oberalppass, que resultó algo decepcionante... pero no es extraño después de todo lo que habíamos visto y superado durante el día.
Al llegar a Flims, paramos a comer algo y eran fiestas. Mientras comíamos unas pizzas, se empezó a escuchar a lo lejos el inconfundible sonido de los ¡¡zanpantzar!!. El acompasado sonido de los cencerros se iba acercando y haciéndose más fuerte. Me levanté y salí a verlos y era un grupo que iba moviendo rítmicamente con los brazos unos enormes cencerros.

Seguimos unos cuantos km y decidimos no apurar hasta St. Moritz, ya que se nos hacía tarde.

La jornada que habíamos completado bien se merecía un rato de descanso para recrearnos y rememorar todo lo que habíamos visto y sentido.
La nieve del Infernalpass era un borroso recuerdo... Nos esperaban el Julierpass, Aprica, Gavia, el Stelvio y su tornante nº 15... pero de eso ya he hablado...


VVVVVVak guztiontzat -/- VVVVVs para todos.

1 comentario:

  1. Jolines, si es que da envidia sana no haber estado ahí pero menudo frío..... brrrrr !!!!!

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